Resumen Económico Nacional: Junio 2020
–
Autor: Ángel Laguna
Durante el mes de junio las cifras oficiales publicadas por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) nos mostraban el gran impacto en nuestra economía local a causa del confinamiento. Asimismo, las diversas proyecciones realizadas por instituciones internacionales estimaban que la contracción del PBI de nuestro país sería de las más graves en América latina, esto sustentado por la incapacidad de poder aplanar la curva en los primeros meses, las sucesivas prolongaciones de la cuarentena y la alta informalidad del mercado laboral.
Lo cierto es que el continente americano se ha vuelto desde hace más de dos meses en el nuevo foco de la pandemia y esta situación aún se ve lejana de cambiar. Es por ello, que las repercusiones económicas serán de las más severas del mundo. De hecho, el Fondo Monetario Internacional estima que Latinoamérica experimentará una contracción económica que bordea los 5.2% para el 2020, en contraste a las estimaciones iniciales en un contexto pre-pandemia que apuntaban a un alza de 1.8%.
Las proyecciones para el periodo posterior a la pandemia son más positivas. Es decir, la recuperación apunta a ser más rápida si la comparamos a otras crisis. Esto principalmente porque esta crisis no ha afectado significativamente el aparato productivo de los países, una segunda razón se asocia a la fuerte dependencia del precio de las materias primas (principal exportación de la región), el turismo (sobre todo en el Caribe) y la vinculación China-Latinoamérica, según el análisis desarrollado por la BBC.
A inicios del mes, el Banco Mundial (BM) presentó su informe de proyecciones macroeconómicas en donde redujo drásticamente la proyección de crecimiento de la economía nacional, situándola en -12 puntos porcentuales para el presente año, esta cifra supone que los efectos económicos en nuestro país será el segundo más profundo en América latina. Pese a ello, la titular del MEF, María Antonieta Alva, informó que las cifras presentadas por el BM no consideraban el plan de estímulo y rescate que lidera su cartera ministerial en pro de la reactivación económica que se viene implementando por fases mensuales. Sin embargo, la proyección del organismo internacional guarda congruencia con la estimación oficial presentada por el Banco Central de Reserva (BCR) que, a través del Reporte de Inflación, el presidente del BCR informó que las proyecciones indican una contracción de 12.5%. El citado informe, contempla a los sectores de construcción, manufactura no primaria, comercio, hidrocarburos y turismo como los más afectados a causa del confinamiento y restricciones de reunión.
El panorama del mercado laboral es también desfavorable, según el reporte de empleo del INEI la población ocupada cayó a 47.6% entre marzo y mayo. Los efectos del aislamiento para intentar frenar la propagación del virus, tuvo devastadores resultados en el mercado de trabajo, la citada publicación informa que solo en Lima se registró una pérdida de 2.3 millones de puestos de trabajo durante los primeros meses de la pandemia. Estas cifras, han ocasionado que la tasa de desempleo logre niveles no registrados en años, situándose en 13% de la población económicamente activa (PEA), sin embargo, esta cifra tiene un cierto sesgo, puesto que, al encontrarnos en cuarentena, las posibilidades para salir y buscar trabajo son muy pocas, lo que influye en que la cifra de desempleo no registre el real impacto de la pérdida de trabajos, según explicó Julio Velarde, director del BCR.
La reactivación por fases de nuestra economía, vino acompañado por programas de impulso económico para dinamizar las relaciones comerciales y preservar las cadenas de pagos. El primer plan fue el de Reactiva Perú, este permitió la financiación de capital de trabajo a tasas mínimas históricas, gracias a una subasta organizada por el BCR. Sin embargo, este programa ha sido criticado porque no ha llegado a la mayoría de Mypes del país, es por ello, que la segunda etapa está enfocada en atender con mayor cobertura a dichas empresas, en donde la imposibilidad de operar y la escasez patrimonial hace que cada día sea se vuelvan más insostenible. Los resultados no han sido los esperados, el desempleo es probablemente la cifra que más preocupa, es por ello por lo que, ante esta situación, se anunció a mediados del mes un segundo programa denominado Arranca Perú, este programa estatal apunta a incrementar la inversión pública principalmente en cuatro sectores: vivienda, trabajo, agricultura y transporte. El objetivo es bastante retador, puesto que se proyecta a generar más de 1 millón de empleos para finales de año. Sin duda, de concretarse dentro de los plazos establecidos, favorecería la ansiada recuperación y vuelta a la nueva normalidad.
Para finalizar este artículo de resumen económico del mes de junio, resulta imprescindible mencionar la medida que aprobó la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso sobre el congelamiento de créditos en el sistema financiero, excluyendo a las cajas municipales, rurales, microfinancieras y cooperativas. Ante esta situación, desde el poder Ejecutivo ya han manifestado la inconformidad de la medida, al considerar inoportuna y que vulnera la Constitución. El análisis desarrollado por el MEF, indica que afectaría en primer lugar a los ahorristas, así como debilitar la credibilidad y estabilidad del sistema financiero en este contexto de incertidumbre, dificultando más aún los planes de reactivación económica.