La historia de Eric Yuan: Quien se volvió millonario en medio de una crisis mundial–
Autor: Ángel Laguna
En medio de una crisis mundial a raíz de un nuevo virus originado en China a finales del 2019, existe una empresa que supo aprovechar esta enorme oportunidad y ha logrado que su fundador y CEO Eric Yuan se convierta en millonario, e inclusive ha entrado al listado anual de personas más ricas del mundo con una estimación de su patrimonio de más de 5,500 millones de dólares según el informe que elabora la revista Forbes.
La historia del fundador de Zoom es realmente increíble. Eric Yuan es un empresario de descendencia chino-estadounidense nacido en 1970. Profesional especializado en ciencias matemáticas e Ingeniería de sistemas por la Universidad de Ciencia y Tecnología de Shandong. Desde joven mostró un espíritu emprendedor, siempre buscando encontrar alternativas que faciliten la reunión de personas de forma digital ante la imposibilidad de reunirse por las largas distancias, el tiempo y los costos de transporte.
Luego de reiterados intentos por ingresar al país americano, en 1997 con 27 años logró obtener la visa. Inició así su nueva vida en Silicon Valley y empezó a trabajar en la empresa WebEx que para ese entonces era una firma especializada en el desarrollo y venta de aplicaciones digitales para su uso en videoconferencias, reuniones en línea, pantallas compartidas y webinars. Inició su carrera profesional como ingeniero programador, es decir, pasaba gran parte del día creando y modificando códigos de programación para el correcto funcionamiento y mejora de las plataformas online. Su destacada labor e ímpetu de mejora continua lo llevó a realizar una línea de carrera exitosa dentro de la compañía, llegando a alcanzar la posición de Vicepresidente de Ingeniería. En paralelo a sus actividades laborales, Eric siempre mantenía en mente la idea que tuvo desde joven acerca del diseño e implementación de una plataforma que te permita conectarte con otras personas de forma fácil, rápida y eficiente. Más aun considerando el auge de la telefonía digital con los primeros teléfonos inteligentes y tablets. Es por ello por lo que, para el año 2011 presentó la propuesta a la compañía, sin embargo, esta no la recibió como hubiera esperado puesto que le manifestaron desconfianza sobre la oportunidad de ser una idea realmente interesante y con potencial para ser un producto disruptivo, todo esto sustentado básicamente en que ya existían ese tipo de servicios ofrecidos por Skype o Google y tenían como respaldo a grandes corporaciones mundiales.
Ante la negativa que encontró en la empresa en donde trabajaba acerca de su idea, es que decide renunciar y crear su propia compañía. El objetivo era claro, diseñar una plataforma que facilite la conectividad entre personas, sea sencilla de usar, no sea un aplicativo muy pesado y logre ser compatible con teléfonos celulares. La tarea sin duda era complicada, sumado a ello las diversas negativas de potenciales inversionistas para su proyecto que lo rechazaban por similares motivos que le dieron en su anterior centro de trabajo. Pese a estas situaciones, Eric se mantuvo entusiasta y trabajando arduamente en desarrollar su gran idea de negocio. El gran conocimiento del sector de Yuan, su indiscutida capacidad y perseverancia lograron que, para mayo del 2012, luego de más de un año de trabajo en prototipos, pueda lanzar la primera versión del producto. Luego de ello, vino una nueva etapa igual de compleja, conseguir los primeros clientes que confiaran en su producto. Cuando logró cerrar sus primeras ventas se vio motivado en seguir impulsando el negocio. Consciente de lo complicado que había sido lanzar el producto al mercado y la alta competitividad dentro del sector, Eric consideró fundamental la relación con los clientes, dando mayor énfasis en el servicio post-venta, puesto que ellos le permitían recibir un feedback de la plataforma y así implantar su filosofía de mejora continua. Mostró un principal interés en aquellos suscriptores que se daban de baja de la plataforma a fin de poder contactarlos, conocer los motivos e identificar todas aquellas oportunidades de mejora.
Con el paso del tiempo la compañía fue creciendo poco a poco, para el 19 de abril de 2019 la empresa lanza su oferta pública inicial al salir a bolsa, cotizando un precio por acción de $700 y una capitalización bursátil de $9.200 millones. Pero fue la crisis por el nuevo coronavirus en que se marca un antes y un después en la historia de Zoom. En cifras, la empresa tenía alrededor de 10 millones de usuarios utilizando la plataforma diariamente y cuando empezaron las medidas de aislamiento social en todo el mundo llegó a alcanzar los 200 millones de usuarios, (como comparación Instagram tardó 3 años en lograr tal cantidad de cuentas), sin duda alguna un crecimiento exponencial increíble. A nivel bursátil, el precio por acción se disparó hasta USD 160 a mediados de marzo y a la fecha cotiza en alrededor de $493, consolidando así un aumento sostenido a lo largo del año. Como se mencionó anteriormente, la necesidad que buscaba solucionar esta plataforma era la de unir personas que se encontraban lejos, principalmente con videollamadas esporádicas. Sin embargo, de la noche a la mañana la empresa empezó a albergar reuniones diarias de oficina para cumplir actividades por teletrabajo, millones de estudiantes a nivel mundial se conectaban a diario y por muchas horas para recibir sus clases escolares y universitarias, entre otras actividades.
Toda esta situación puso a prueba a la plataforma que comenzó a llevar un ritmo de funcionamiento para la que no estaba del todo preparada. Es por ello, que los problemas no tardaron en llegar. Zoom experimentó una seria crisis de reputación puesto que recibió muchas denuncias que alegaban problemas de privacidad y seguridad en las encriptaciones de las videoconferencias. Por si fuera poco, se les acusó de filtrar información al propio Facebook y al gobierno chino. Sin duda alguna, esto conllevó a que millones de usuarios dejen de usar la plataforma por temor de que se filtrasen sus datos personales lo cual vino acompañado por una baja considerable del valor de cotización de las acciones de la empresa en el mercado bursátil. Ante este escenario, Eric no tuvo más remedio que dar la cara, manifestar su preocupación y parar las operaciones mientras que se hacían las correcciones debidas que incrementen los algoritmos de seguridad a fin de garantizar la confidencialidad del contenido y datos de las personas cuando usen Zoom.
A la fecha, los problemas mencionados ya fueron solucionados y el crecimiento de Zoom es un ejemplo de éxito empresarial a nivel mundial. A su vez, Eric ha buscado que su empresa también tenga un componente socialmente responsable, prueba de ello, es que en la actualidad apoya a instituciones educativas en Japón, Italia y USA para que puedan acceder a su plataforma gratuita y así garantizar la conectividad de las actividades educativas a miles de estudiantes.